EDUCANDO VALORES

Educando Valores
Isa Cisneros de Sapene Miércoles, 19 de agosto de 2009

Desde la Escuela de Padres del Colegio San Agustín El Paraíso, tuve la hermosa oportunidad de diseñar, para la dinámica llamada “Valores para Vivir” 12 talleres “ El Caleidoscopio de los Valores” lo que resultó una extraordinaria experiencia, muy nutritiva para el alma de los padres que vivimos estos momentos, junto a aproximadamente 450 alumnos de III etapa y media diversificada. (Edad entre 14 y 17 años)
El objetivo al diseñar este taller, fue en primer lugar, además de compartir y discutir sobre los valores, mostrar a los docentes lo orgullosos que tienen que sentirse al contribuir en la formación de jóvenes ciudadanos exitosos para el futuro.
Mostrarles a los padres y representantes que no han perdido su tiempo en orientar día a día a sus hijos en aquellos aspectos, sencillos de la vida, que los harán exitosos el día de mañana en cualquier proyecto que emprendan.
Y a los estudiantes que tuvieran la oportunidad de expresar desde lo más profundo de su alma y con plena libertad de expresarse lo que pensaban y sentían sobre los valores de la vida.
La dinámica consistió en presentarle a los jóvenes un espacio creativo donde ellos tuvieran la oportunidad de motivarse para decir lo que tenían en su mente y corazón sobre los valores, de cooperación, libertad, felicidad, honestidad, humildad, amor, paz, respeto, responsabilidad, sencillez, tolerancia y la unidad, valores estos destacados por la Organización de las Naciones Unidas que pueden contribuir a la transformación del mundo.
Lo mas importante de esta experiencia fue el interés que mostraron los jóvenes por esta actividad y es necesario indicar que se dio al inicio una pequeña motivación que estimuló los aspectos positivos que considerábamos que tenían para aportar a la actividad. Percibíamos que tenían la información y los conocimientos. ¡No nos equivocamos!
El hecho de que todos participaran hizo más interesante los talleres, porque a pesar de que en muy pocas oportunidades hubo cierto temor al miedo escénico - ya que cada uno expresaba en voz alta lo que había escrito y luego lo fijaba en el caleidoscopio-. Esto se supero a medida que ellos mismos escuchaban a sus compañeros aportar ideas inteligentes, hermosas y profundas sobre cada uno de los valores antes mencionados y les entusiasmaba decir en voz alta sus opiniones. ¡Fue hermoso el resultado!
El éxito de esta experiencia se debió a muchos aspectos que se unieron en un instante: _ La disposición espontánea y desinteresada de los padres que conformamos la Escuela de Padres que estuvimos dispuestos a realizar estos 12 talleres (como una de las tantas actividades programadas por la Escuela de Padres) _La disposición del colegio, la perseverancia y organización del padre Miguel y Carmen Zulay Peña al apoyar las ideas expuestas, con tanto respeto y entusiasmo.
_La oportunidad que nos dieron los docentes en su espacio para compartir con los jóvenes tan interesante actividad que complementó las unidades del programa.
El comportamiento extraordinario de los muchachos y muchachas, quienes dieron muestra de madurez y responsabilidad al haber comprendido el valor y la importancia de la actividad que compartimos. ¡Ellos se dieron el permiso de disfrutar la actividad¡ ¡Una muestra de inteligencia emocional!
Esto nos permitió hacer hincapié en que ser inteligente emocionalmente es ser diferente y consciente de un conjunto de valores, que les permite actuar ante las situaciones imprevistas que se presentan día a día en sus vidas, de una forma sensata, prudente y sobre todo con mucha responsabilidad personal y social, con honestidad, cooperación, paz, libertad, tolerancia, unidad, sencillez, humildad, respeto y felicidad.
Ellos entendieron, estuvieron de acuerdo y se sintieron estimulados con lo discutido. De la misma manera comprendieron que si cumplen y aplican estos valores conseguirán el éxito en todo proyecto que inicien en su vida.
Mi conclusión: Como mensaje para todos los venezolanos. Tenemos que sentirnos felices y seguros de la juventud que hemos formado en nuestras aulas y sobre todo comunicárselos a ellos, que sientan la confianza y la seguridad de los mayores de su actuación en la vida. En esta oportunidad se demostró como sin una computadora, sin un libro para investigar y sin una conferencia que les refrescara la información, estos jóvenes tan solo con sus pensamientos y conocimientos lograron en 45 minutos definir con sus palabras 12 valores, que representan una guía a lo largo del camino y que sabemos son la base para dar los pasos mas simples y profundos de la vida. ¡Esto les permitió conocerse mas, a sí mismos y entre ellos!
Pero lo más hermoso de esto y que no debemos dejar pasar por alto es que estos jóvenes y como muchos otros de este país, tienen sembrados estos valores en su alma y su corazón, porque lo que dijeron les brotó de su interior. ¡No se ha perdido el tiempo! ¡No podemos abandonarlos!
Se pudo observar que al conocer estos valores de la manera como lo expresaron, ellos están preparados para distinguir la forma adecuada de la inadecuada y sabrán elegir el primer camino, aunque normalmente sea el mas largo. ¡Tenemos que motivarlos!
Considero que se sintieron identificados y satisfechos cuando se les manifestó, que si sus decisiones están verdaderamente guiadas por los valores, seguramente encontraran armonía en su interior, sus familias, sus hogares, su comunidad, su país y sobre todo en su colegio.
Para finalizar, uno de los tantos motivos por la que esta actividad resultó fructífera, fue que en estos 12 talleres impartidos pudimos comprobar que todo se llevó a cabo exitosamente, gracias a uno de los valores definidos como fue la unidad. Al existir una visión compartida, como fueron los valores que se trabajaron. Una esperanza anhelada, como la que todos tienen de conseguir la paz y calidad de vida. Una causa común como fue cumplir con el objetivo planteado con la determinación y el compromiso que todos asumimos. ¡Pudimos convencernos que fue la unidad la que hizo que una tarea difícil resultara fácil!
Esta unidad de los padres, los alumnos y los docentes, permitió vivir la experiencia de la cooperación, motivó el fervor y el entusiasmo por la tarea a realizar y convirtió la atmósfera en poderosa y facilitadora. Hubo unidad porque existió una gran armonía entre los actores del grupo. ¡Que esto nos sirva de experiencia, para futuros proyectos!
isacisneros17@gmail.com
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