Isa Cisneros de Sapene
Viernes, 23 de mayo de 2008
He venido trabajando el tema de la inteligencia emocional y la gerencia cultural, y no puedo dejar pasar un evento tan importante, que me enorgullece como venezolana, como ha sido el otorgamiento del Premio Príncipe de Asturias en las Artes 2008 al Sistema Nacional de Orquestas Infantiles y Juveniles de Venezuela.
Tuve el honor de estar de directora en el Consejo Nacional de la Cultura durante el período en que el Dr. José Antonio Abreu fue Ministro de Cultura, presidente del CONAC, y se me presentó la oportunidad de estar muy cerca de esta obra tan hermosa, desde el mismo día que se inició.
Fueron muchas las ocasiones que con mucha emoción, cuando asistí a eventos nacionales e internacionales promoví y presenté con orgullo la experiencia maravillosa que se gestaba en Venezuela, como modelo de una Gerencia Cultural.
Como socióloga desde el primer momento que conocí la experiencia la apoyé, fuimos muchos los que captamos la fortaleza y los impactos que se generarían con este sistema que iba mas allá de educar para la música, pues tenía como misión un contenido social y cultural que abarcaba y atendía al ser humano en su contexto y su entorno tomando en cuenta su espíritu, su arte, su inteligencia y su talento, donde no solo los niños y los jóvenes descubrían un mundo maravilloso, sino que lo trasmitían a sus familias y a sus comunidades. Un verdadero proyecto socio cultural.
Pero ¿cuál fue la clave de este éxito? Que tuvo un gerente cultural como José Antonio Abreu que supo rodearse de docentes, músicos, animadores, gerentes y administradores culturales que conformaron equipos con pertenencia, perseverancia, sensibilidad, tolerancia y mucha inteligencia emocional, que les permitió identificar las necesidades y las realidades de tantos jóvenes de una forma sencilla y respetuosa de su integridad, pensamientos y sobre todo de las ideas que traían de su núcleo familiar. Nada era impuesto y la creatividad, la emocionalidad, la espontaneidad y sobre todo la autenticidad y la libertad de expresarse han sido la base de la fortaleza de este hermoso proyecto.
Como un buen director de orquesta, José Antonio Abreu ha sabido iluminar a cientos de niños y jóvenes que con luz propia irradian e inspiran a miles y miles de seres humanos en el mundo entero, mostrándoles a muchos lo que realmente es un proyecto eficiente y eficaz, de integración e identidad nacional, que con libertad trasmite lo mas hermoso de un país como es su música y su juventud, que como una película proyecta y le grita al mundo quiénes y cómo somos los verdaderos venezolanos, que desde hace varias décadas estamos luchando por mantener nuestra autenticidad.
Estos niños y jóvenes de la mano de un gran maestro desde hace 30 años, como embajadores de la cultura nos han dado una lección al abrirnos caminos grandiosos que son los que queremos transitar. Gracias mil gracias por ese regalo.
isacisneros17@gmail.com
lunes, 9 de marzo de 2009
Música, Inteligencia Emocional y Gerencia Cultural
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1 comentario:
Hace nueve años escribi este articulo . Hoy lo recuerdo en honor a ese gran maestro jose antonio abreu que entrego su vida a este hermoso proyecto de las orquestas juveniles que han hecho historia en nuestro pais venezuela. Subio al cielo a formar una orquesta con todos esos angeles que dejaron la tierra.
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